“La recaudación por concepto de IETU no ha alcanzado los objetivos fijados en ninguna de las sucesivas leyes de ingresos, desde que entró en vigor en el 2008. Ese año se quedó corta en 33%; en el 2009, la brecha fue de 19%, y en el 2010 cerró con 15% menos de lo presupuestado, a pesar de que la economía creció 5.5 por ciento. Este año, la tendencia es similar: durante el primer trimestre se recaudó 18% menos de lo proyectado”, refirió.
El próximo 30 de junio vence el plazo para que la SHCP entregue a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados una evaluación sobre la conveniencia de derogar diversas disposiciones contenidas en la Ley del Impuesto Sobre la Renta, recordó el líder patronal.
El objetivo expreso de esta disposición fijada en la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única del 2007 es decidir si algunos tratamientos considerados en el régimen del ISR deben regularse dentro del marco del IETU. Así que “es tiempo de decidir”, instó.
Para las empresas, el IETU ha significado una carga administrativa adicional, que afecta directamente su competitividad, afirmó la Coparmex.
Se han implementado medidas para simplificar, pero no compensan el hecho principal de lidiar con dos impuestos de forma paralela, agregó Gutiérrez Candiani.
A través de la Señal Coparmex, el dirigente empresarial expresó que más allá de incentivar la inversión nacional a través del IETU, ésta se desvaneció y “existe el riesgo de que se desaliente más la Inversión Extranjera Directa.
Está latente la posibilidad de que en Estados Unidos no se permita acreditar este impuesto para efectos del ISR.
Esto impactaría a multinacionales con presencia en México y podría ahuyentar la inversión significativa”.
El empresario recordó que el IETU fue una respuesta alternativa ante la ausencia de acuerdos entre las fuerzas políticas con representación en el Congreso para emprender la reforma hacendaria, pero como en otros temas torales para el país han dominado las necesidades y los intereses políticos, con un predominio de criterios ideológicos y electorales, no técnicos y económicos.
“Los ingresos tributarios totales han aumentado ligeramente: 0.7% entre el 2007 y el 2010, llegando a 9.6% del Producto Interno Bruto (PIB). Sin embargo, aún no retomamos los niveles del 2008 y seguimos muy por debajo del promedio de 20% del PIB entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos”, destacó Gutiérrez Candiani.