UNIFICACIÓN DE IMPUESTOS
“Lo que queremos es un solo impuesto, que sea más competitivo; queremos un ISR o un impuesto único que realmente ayude a la generación del empleo y de mayor inversión”, aseveró.
Explicó que se busca eliminar el IETU y rescatar lo positivo de este impuesto para adherirlo al ISR, de tal forma que quedaría sólo un impuesto, “como lo propusimos en el 2010 y fue de 25%, eso ayudaría mucho a las empresas”, aseguró.
Manuel Gildardo Pérez Sánchez, presidente del Grupo IMEF Querétaro, dijo que la recomendación del IMEF es generar un solo impuesto, ya que actualmente es una doble tributación.
“En lugar de que simplifique, complica las cosas por una parte y, por otra, el hecho de crear el IETU fue para dar facilidad a la inversión; en el sentido de tener un ingreso controlado que permitiera la creación de infraestructura y la cuestión es que no ha dado resultado”, afirmó.
En Querétaro, comentó que en el pasado era fácil cumplir las obligaciones fiscales; sin embargo; actualmente se complica más y por supuesto “todo mundo cada día trata de darle la vuelta para no complicarse la vida”.
Con lo que respecta al ISR, que recientemente sufrió un aumento de 28 a 30%, consideró que debe de ser un impuesto directo al consumo, como el caso de Impuesto al Valor Agregado, en el que participen todas las personas y no sólo las que están cautivas.
Ante la solicitud a la Federación del gobernador José Calzada, como presidente de la Comisión de Hacienda de la Conferencia Nacional de Gobernadores, de que se destinen como incentivo recaudatorio el ISR en beneficio de las entidades, Manuel Gildardo Pérez Sánchez, del IMEF local, consideró positiva la medida, dado que cada entidad podría aprovechar lo mejor conforme a sus necesidades.
“En la medida que se descentralice (el ISR), seguramente con una administración responsable, será mejor”, declaró.
RECURSOS DESVIADOS
La inseguridad y violencia que se registran actualmente en el país ocasionan que se apliquen mayor cantidad de recursos para la protección.
5% podría llegar a ser el costo por inseguridad del PIB.
50,000 millones de dólares significaría ese costo.
5 a 15% abarca el costo que se invierte en seguridad.